¿por qué se contamina el agua?

¿Por qué se contamina el agua?

El agua constituye dos terceras partes del mundo, es indispensable para la vida en la Tierra y sus usos son infinitos. El agua no solo sirve para actividades externas, si no también internas, por ejemplo, en nuestro cuerpo el agua nos ayuda a conducir nutrientes y desechar sustancias en los cuerpos vivos.
El consumo promedio por persona en el Distrito Federal es de 364 litros por día, puede parecer poco pero comparados con las estadísticas en países europeos que en promedio consumen 120 litros diarios, nuestra suma parece excesiva, además de que su uso no es igual para todos, porque mientras una persona de altos recursos puede gastar hasta 600 litros al día, una persona de bajos recursos usa tan solo 20.

Las personas utilizamos el agua para usos directos como bañarnos, cocinar y beberla y usos indirectos que incluyen las cantidades de agua utilizadas para cultivar, para procesar materiales y para producir algunos otros.
Con el constante crecimiento de las culturas se desarrollaron tecnologías para el transporte del agua así como técnicas para su uso y re-uso. Éstas acciones favorecieron el crecimiento de la población que a su vez significó un incremento en el uso del agua.

Por contaminar entendemos la acción de ensuciar o envenenar, sin embargo, en la química se refiere simplemente a una sustancia que esta mezclada con otra de modo que ninguna es pura. Algunas de estas sustancias que se encuentran mezcladas en el agua dan un sabor placentero, como los refrescos, pero otras pueden provocar mal olor, sabor y causar daños a nuestra salud.
La actividad humana contamina el agua de manera directa o indirecta: la primera es cuando directamente vertemos sustancias nocivas en ella y la segunda es cuando nuestros deshechos llegan a ella por medio del subsuelo. Las fuentes de contaminación del agua se clasifican en urbana, industrial y agropecuaria.
 Urbana: es la fuente mas difícil de controlar, nuestra casa es una de las mayores fuentes de desperdicios y en nuestro afán de limpiar, perjudicamos al agua con el uso de detergentes, blanqueadores, suavizantes, etcétera.
Industrial: se produce cuando los deshechos son arrojados a un sistema urbano de drenaje o directamente al agua.
Agropecuaria: es la fuente que incluye fertilizantes, pesticidas y herbicidas químicos ademas de deshechos de animales de ganado y aunque ésta es de importancia menor la cantidad de contaminantes va en aumento.

Los contaminantes químicos se pueden clasificar en biodegradables y no biodegradables:
biodegradables: nitratos y fosfatos procedentes de los fertilizantes o de la descomposición de la materia orgánica.
no biodegradables: plásticos, pesticidas, metales pesados entre otros, que por ser extraños al ecosistema casi no encuentran organismos capaces de transformarlos.
Por esta razón, es importante que aprendamos a consumir productos biodegradables.

Efectos en el medio ambiente de los contaminantes mas comunes:
MATERIA SÓLIDA: los sólidos sedimentados forman una capa de espesor variable en el fondo del cuerpo acuífero, que termina dañando y aniquilando las formas vivas presentes ahí.
METALES: son tóxicos para los procesos vivos que tienen lugar en el agua.
ACEITES: la extracción, transportación y procesos del petróleo arrojan grandes cantidades de aceites que envenenan el agua y alimento de los animales.
MATERIA ORGÁNICA: para su descomposición requieren de una gran cantidad de oxígeno, por lo que disminuyen la cantidad de este en el agua.
PLAGUICIDAS: a pesar de que solo son tóxicos en altas concentraciones, aún no se conocen todas las posibles consecuencias de su uso.
DETERGENTES: el potasio que contienen promueve el crecimiento de algas que consumen el oxígeno del agua y alteran las condiciones de vida de los peces y plantas que viven ahí.

La contaminación del agua es un problema que nos afecta a todos y por esta razón todos deberíamos poner de nuestra parte para la preservación de este recurso y por consecuencia la preservación de la vida humana.

Fuente de Consulta:
Química 1, Agua y Oxígeno
Antonio Rico Galicia,Rosa Elba Pérez Orta
Págs. 15-22